Los Imposibles Levante 4-1 Vinalesa
Sin ganas escribo hoy la crónica y se nota, todo me sale negativo, son rachas lo sé, en el fútbol como en la vida, cuando las cosas te salen perfectas "cuidadin" cuanto más subes más difícil es mantenerse, sin embargo he intentado buscar el lado positivo (sugerencia de Neus), después de cuatro partidos sin ganar en los que solo hemos conseguido sumar un punto y en los que nuestro juego ha bajado de nivel claramente, solo espero que el partido de hoy sea el de tocar fondo para remontar, cuando se está mal solo cabe ir a mejor.
Otra vez era de noche cuando me levanté, a las claritas del día nos fuimos para la playa, a la Malvarrosa, al campo de Los Imposibles, sito en la mejor zona residencial de Valencia, también conocida como Las Casitas Rosas, donde, se codean, la alta aristocracia, con los nuevos ricos, anillos de oro (lo que antes se llamaban sellos) hasta no poder mover los dedos, cadenas y cordones al cuello con los que se podría atar una moto, coches de alta gama...en fin lo mejorcito de cada casa.
El árbitro salió tarde y lo primero que hizo fue santiguarse, sabia bien donde estaba, no se iba a complicar la vida, pitó lo que le mandaron y a la marcha, que después tenia que pitar otro partido allí, la verdad es que no le complicamos el partido en absoluto, esta primera mitad se podría resumir con una sola frase; saltamos al campo, gracias a Dios solo nos hicieron un gol y Adrián de un cabezazo le quitó los mocos a un defensa, ya esta... ahora la voy a intentar estirar un poco más.
El Vinalesa (hoy con su equipo al completo), salto al campo y se dedicó a ver jugar a fútbol a Los Imposibles, nos ganaron en todo, en ataque, en el medio y en defensa, pero sobre todo, en ganas de ganar, no nos machacaron en la primera mitad por que San Honorato quiso que fallaran hasta un penalti y que no lograran marcar hasta el último minuto de esta primera mitad, por parte del Vinalesa...haber... dejadme pensar...aaaaah... nada, el Míster estaba malo, errores continuos en todas las lineas fallos individuales y colectivos, si hubiese podido, yo creo que los cambia a todos y para colmo en la última jugada de esta primera mitad Adrián que era el único que luchaba, en un salto a destiempo chocó cabeza con cabeza con un defensa y no pudo continuar (solo decir, que Adrián se esta ganando el puesto por entrega y lucha pero, llega tarde demasiadas veces y las entradas fuertes hay que medirlas muy bien o no terminará ningún partido, bien por tarjetas o lo que es peor por alguna lesión), como he dicho antes logramos llegar al descanso con uno a cero, buen resultado visto el juego de ambos equipos.
Los comentarios en la grada no eran halagüeños, mucho tenia que cambiar el juego del equipo si no quería perder este partido, yo la verdad es que intenté ser positivo y pensar que en la segunda mitad el juego mejoraría y así fue, comenzó la segunda mitad y el juego mejoró, pero no el nuestro sino el de ellos, ni siquiera los cambios se notaron, un Vinalesa apático y sin ganas se dedicaba a deambular por el campo sin rumbo, ni siquiera los gritos del Míster sirvieron para nada, Los imposibles nos dieron un baño, nos torearon, nos sacaron los colores, puede que su afición sea de vergüenza, puede que su entrenador sea un impresentable, pero hoy Los Imposibles se merecieron la victoria y nosotros la goleada. Esta segunda mitad fue penosa, nos ganaron la espalda mil veces, todos los saques para ellos y ni una jugada trenzamos bien, para colmo el árbitro no nos pitó ni una sola falta a favor, con lo cual, ni a balón parado, no sacamos ni un solo corner en todo el partido, una falta a favor tuvimos y nos pillaron a la contra, de locura. En los minutos finales el Vinalesa quizás hubiese podido maquillar un poco el resultado, un balón de Arnau al larguero que pudo ser gol y el gol del honor de César en el último minuto que ni siquiera se celebró cerraron un partido para olvidar.
El Míster se fue dolido y muy enfadado, no por perder sino por el juego del equipo, por que él mejor que nadie sabe que cuando quieren hacen un fútbol brillante que nada tiene que ver con lo visto hoy en el campo, puede quizás, que hayan perdido esa punta de motivación que te daba la posibilidad de ser primero o segundo, no sé, a ellos la verdad es que no parece que les afecte demasiado, el sistema de formación deportiva de nuestra escuela les ha enseñado desde pequeños que hay que jugar y divertirse, que cuando acaba el partido se pierda o se gane no pasa nada, y esta muy bien, hasta ahora, pero con estas edades (algunos ya se afeitan) habría quizás que empezar a explicarles también por que se le llama a un gol, el gol del honor o lo que son el orgullo, la entrega, la dignidad, el coraje, la vergüenza y sobre todo la diferencia entre ser humilde y que te humillen.
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